Mes: marzo 2013

Glorioso sábado

Glorioso sábado

Julio César Arreaza B

La Gran Vigilia Pascual que celebraremos esta noche santa conduce a la fiesta mayor de la Iglesia: la Pascua de Resurrección, el día que El Señor venció a la muerte, tiempo sin igual, de gracia fortalecedora y renovadora de nuestra fe en El Redentor y en nuestra Salvación. Jesús al resucitar hace posible la resurrección de todos nosotros que éramos cuerpos mortales.

La Resurrección marca el momento más trascendente de la Historia: el tiempo se dividirá en antes y después de la Resurrección del Señor. Reflexionemos en esta noche de gracia sobre el trascendente significado de la pasión, muerte y resurrección de Cristo. Morimos con Él al pecado y resucitaremos con Él a la vida. Ya no somos seres para- la- muerte sino para- la- vida.

Este sábado glorioso triunfa el Señor sobre el pecado y la muerte, con su triunfante Resurrección.

La Vigilia Pascual nos introduce en el domingo más importante de la historia: el Domingo de la Pascua de Cristo. El paso de la vida a la muerte. De la esplendorosa noche de pascua nacen la alegría, la luz y la paz de Cristo que se extienden a toda la comunidad cristiana y llegan a todos los intersticios del espacio y del tiempo.

La Resurrección de Cristo abre el Cielo para nosotros, nos da una nueva vida, las posibilidades de encarnar, si así lo decidimos, el auténtico hombre nuevo y nos da razones para vivir y esperar. Él es el camino, la verdad y la vida.

Meditemos en esta noche santa sobre el inmenso amor de Dios hacia nosotros, preguntémonos y respondámonos qué hacemos aquí, para qué nacimos y qué misión venimos a cumplir.

Concédenos Señor el espíritu para recibir siempre con gozo lo bueno y soportar con paciencia lo malo. Enséñanos a privarnos de lo superfluo y a compartir lo nuestro con todos los demás.

Qué noche tan dichosa la de esta noche en la que se une el cielo con la tierra, lo humano y lo divino. Esta noche santa de gracia es clara como el día, ahuyenta los pecados, lava las culpas, devuelve la inocencia a los caídos, la salud a los enfermos, la alegría a los tristes, expulsa el odio, trae la concordia y doblega a los poderosos. Qué la luz de Cristo, resucitado y glorioso, disipe las tinieblas que inundan nuestro corazón y nuestro espíritu.

Le pedimos a Cristo que aumente nuestra fe para que nunca dudemos de su misericordia. En su resurrección la noche ha brillado como el día, la noche es más clara que el mediodía, más luminosa que el sol, más blanca que la nieve, más brillante que las antorchas y más dulce que el paraíso. Esta noche que no conoce tiniebla, se nos aleja el sueño y velamos junto a los ángeles de Dios, noche pascual que espanta a los demonios, esperada durante un año.

@JulioCArreaza

L’un des jésuites arrêtés par la junte en Argentine publie une déclaration .

L’un des jésuites arrêtés par la junte en Argentine publie une déclaration

Le P. Jalics, arrêté en 1976 avec son conférère jésuite, le P. Yorio, par les militaires argentins, explique les circonstances de cette arrestation.

Il se refuse à attribuer une quelconque responsabilité au pape François – alors provincial des jésuites – dans cette affaire

Sur le site de la province d’Allemagne des jésuites, le P. Franz Jalics, Imagenjésuite, enlevé avec le P. Yorio par la junte militaire en mai 1976, a publié vendredi 15 mars 2013 une courte « déclaration ». Une controverse a effectivement surgi depuis l’élection comme pape du cardinal Jorge Bergoglio, ancien provincial des jésuites d’Argentine et ancien archevêque de Buenos Aires, sur son rôle éventuel dans cette arrestation. En effet, trois mois avant celle-ci, il avait enjoint les deux jésuites de quitter leur bidonville. Pour certains, cette décision a pu être interprétée par la junte comme un « lâchage ».
«Je vivais à Buenos Aires depuis 1957, commence le P. Franz Jalics, d’origine hongroise. En 1974, poussé par le désir intérieur de vivre l’Évangile et rendre visible la terrible pauvreté, avec la permission de l’archevêque de Buenos Aires et du Père Provincial, alors Jorge Mario Bergoglio, je me suis installé avec un camarade dans une « favela », un bidonville. De là, nous avons continué notre enseignement à l’Université ».
Vous n’êtes pas à blâmer
« Dans notre quartier, nous n’avions tous les deux de contact ni avec la junte ni avec la guérilla », assure le P. Jalics. Selon lui, c’est la décision d’un de leurs collaborateurs, un « laïc » avec lequel ils avaient « perdu contact », de rejoindre la guérilla, qui a porté sur eux les soupçons de la junte. « Neuf mois plus tard, il a été capturé par les soldats de la junte et interrogé, et ils ont découvert qu’il était avec nous », raconte encore le jésuite.
« C’est avec l’hypothèse que nous avions des liens avec les guérilleros que nous avons été arrêtés. Mais après un interrogatoire de cinq jours, l’officier qui avait mené l’enquête s’est exprimé en ces termes : ‘Pères, vous n’étiez pas à blâmer. Je vais faire en sorte que vous puissiez revenir dans le bidonville’. Malgré cet engagement, d’une façon inexplicable, nous sommes restés détenus pendant cinq mois les yeux bandés et les mains menottées. Je ne peux pas commenter le rôle du P. Bergoglio dans ce processus », déclare-t-il sobrement.
Le P. Jalics souligne seulement avoir quitté l’Argentine après sa libération et avoir eu l’occasion d’échanger « quelques années plus tard » avec le P. Bergoglio, nommé entre-temps archevêque de Buenos Aires, « pour discuter des événements ». « Ensuite, nous avons célébré la messe en public et nous nous sommes embrassés solennellement. En ce qui me concerne, je suis réconcilié avec ces événements et considère en avoir terminé », conclut-il en adressant ses bénédictions au pape François pour son pontificat.

http://www.la-croix.com/Religion/Actualite/L-un-des-jesuites-arretes-par-la-junte-en-Argentine-publie-une-declaration-_NG_-2013-03-17-921854

Cantaremos. 17 de Marzo, V Domingo de Cuaresma /C

¡Jesús refleja el modo de actuar de Dios!

¿Nadie te ha condenado? Pues yo tampoco, porque he venido para llamar a los pecadores a penitencia. Pero no es un gesto contra la ley, sino por encima de la ley y ofreciendo una interpretación auténtica de la ley como expresión de la voluntad de su Padre (Mt 5,17). La misericordia está por encima. No se trata de un quebrantamiento de la ley. Como tampoco la quebrantó Jesús cuando se dirige al Padre para que perdone a quienes le han condenado porque no sabían lo que hacían. Históricamente este asunto era especialmente delicado. Jesús lo resolvió de manera sapiencial y definitiva. No aprueba la conducta de la mujer, ya que Jesús sigue manteniendo como válidos los mandamientos de la ley de Dios recogidos y transmitidos en el Antiguo Testamento. El adulterio no es el camino para conseguir la felicidad. Dios tiene otro plan sobre el matrimonio como comunidad de vida y de amor que expresa visiblemente la comunidad de vida y de amor que se realiza en la intimidad de su misterio. La fidelidad a esa comunidad de vida y de amor refleja la fidelidad infinita de las tres personas divinas. Dios promulgó los mandamientos para que el hombre y las mujeres fueran libres, felices y en comunión de vida. La ternura entre los hombres y mujeres comprometidos con el vínculo sagrado del matrimonio reflejan la ternura de los tres en el seno de la divinidad. Por eso no se puede romper ni suspender entre los hombres porque tampoco cesa ni se suspende en el seno de la divinidad. Pero aquella mujer había sido víctima de su debilidad. Jesús mantiene los principios, pero es misericordioso con los que los quebrantan siempre que exista en ellos una voluntad decidida y manifestada, en el futuro, a tomar otro camino, a restaurar la comunión perdida, a hacer posible la fidelidad quebrantada. Jesús es obediente a la voluntad de su Padre y, a la vez, misericordioso con los hombres. Restaura esa voluntad en el corazón humano. Yo tampoco te condeno, declara Jesús, pero en adelante cuida esa comunión y fidelidad que es la fuente de la verdadera felicidad. Hoy como ayer esta actitud liberadora de Jesús sigue teniendo vigencia. Una liberación que llega al corazón de los hombres y mujeres. El proyecto de Dios sólo pretende que los hombres sean realmente felices. Lucas ha comprendido la misericordia de un modo especial.

¡El pecado no es humano!

A las puertas ya de la Pascua, creo que la reflexión de este Domingo ha de centrarse, desde el Evangelio, en que el pecado no es humano. Que el pecado hay que entenderlo desde la perspectiva de la cruz. El verdadero relieve y significación del pecado no son sólo sus consecuencias antropológicas (que lo son y mucho), sino su interpretación cristológica. Esta perspectiva puede iluminar la fe y la esperanza de los creyentes que quieren escuchar la palabra. Si bien es verdad que Jesús nunca pecó (porque repugnaba a su Persona divina) y porque el pecado no es humano, no obstante estuvo siempre cerca de los pecadores. Este rasgo habría que subrayarlo una y otra vez. El hombre moderno se juega en este asunto su paz personal, familiar y social. El desequilibrio de la sociedad se produce por la ruptura de comunión con el Dios de la paz, de la justicia y del amor. Un triángulo sobre el que hay que construir nuestra sociedad familiar, social e internacional. Este lenguaje es inteligible para los hombres y mujeres de nuestro tiempo. El misterio pascual, expresión del amor sustitutivo de Jesús, responde a esta necesidad de nuestro tiempo.

Fr. Gerardo Sánchez Mielgo.Convento de Santo Domingo. Torrent (Valencia)

CANTAREMOS:

  • Reunidos en el nombre del Señor………………………………….159
    • Señor ten piedad-Gloria y honor a Tí
  • En la patena ……………………………………………………………….68
    • Santo-Padre nuestro-La paz
    • Cordero de Dios
  • Este es el ayuno ………………………………………………………….86
  • El Señor es mi fuerza……………………………………………………80
  • Dame un nuevo corazón………………………………………………..64

17 de Marzo. V Domingo de Cuaresma /C

Evangelio según San Juan (Jn 8,1-11)

En aquel tiempo, Jesús se retiró al monte de los Olivos. Al amanecer se presentó de nuevo en el templo y todo el pueblo acudía a él, y, sentándose, les enseñaba.
Los letrados y los fariseos le traen una mujer sorprendida en adulterio, y, colocándola en medio, le dijeron:
–Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio. La ley de Moisés nos manda apedrear a las adúlteras: tú, ¿qué dices ?.
Le preguntaban esto para comprometerlo y poder acusarlo.
Pero Jesús, inclinándose, escribía con el dedo en el suelo.
Como insistían en preguntarle, se incorporó y les dijo:
–El que esté sin pecado, que le tire la primera piedra.
E inclinándose otra vez, siguió escribiendo.
Ellos, al oirlo, se fueron escabullendo uno a uno, empezando por los más viejos, hasta el último.
Y quedó solo Jesús, y la mujer en medio, de pie.
Jesús se incorporó y le preguntó:
–Mujer, ¿dónde están tus acusadores?, ¿ninguno te ha condenado?
Ella contestó:
–Ninguno, Señor.
Jesús dijo:
–Tampoco yo te condeno. Anda, y en adelante no peques más.

Cantaremos. 10 de Marzo. IV Domingo de Cuaresma /C

Según Jesús, el Reino de Dios, es una oportunidad para todos. Así lo expone en muchas de sus parábolas, sobre todo en la más cautivadora de todas, que bien se podría llamar “La Parábola del Padre bueno”. La parábola está dirigida a personas que piensan mediante imágenes y no transmite una enseñanza simplemente conceptual, sino en sentido complejo, como lo es la vida misma.

En tiempos de Jesús la familia lo era todo: hogar, trabajo, supervivencia, protección y seguridad. Por eso todo el mundo se sintió interesado cuando Jesús comenzó su relato. ¡Cómo iba un padre a repartir su herencia estando en vida? ¡Lo que el hijo menor le pide es una locura! Se entregará a una vida desquiciada que lo conducirá a la autodestrucción. Sólo entonces recordará que tiene un padre y decidirá volver, aunque entonces le reciba sólo como un empleado. Quedará sorprendido ente la entrañable agogida del padre, el abrazo y los besos que son como los de una madre.

El hijo harapiento ya no es más el mendigo depravado; es “el hijo que había muerto y ha vuelto a la vida”. El arrepentimiento quiebra las normas de la mera justicia. Esta conversión tiene un punto de partida creador que viene de Dios, ya que el pecado produce ceguera y la ceguera espiritual hunde al hombre en las tinieblas. El que se convierte logra salir de la oscuridad y esta luz sólo es obra de la Gracia. ¿Será esta la mejor metáfora de Dios?…. ¿Vale tanto nuestra conversión?………….

CANTAREMOS:

  • Vienen con alegría…………………………………………………219
    • Señor ten piedad-Tu palabra me da vida
    • Antífona
  • Este Pan y Vino Señor………………………………………………91
    • Santo-Padre nuestro-La Paz
    • Cordero de Dios
  • Tan cerca de mi…………………………………………………….193
  • Por Tí Señor………………………………………………………….134
  • Ya no temo……………………………………………………………223

10 de Marzo. IV Domingo de Cuaresma /C

Evangelio según San Lucas (Lc 15,1-3.11-32)

En aquel tiempo, se acercaban a Jesús los publicanos y los pecadores a escucharle. Y los fariseos y los letrados murmuraban entre ellos:
–Este acoge a los pecadores y come con ellos.
Jesús les dijo entonces esta parábola:
Un hombre tenía dos hijos: el menor de ellos dijo a su padre:
–Padre, dame la parte de la herencia que me toca .
El padre entonces les repartió los bienes.
No muchos días después, el hijo menor, juntando todo lo suyo, emigró a un país lejano, y allí derrochó su fortuna viviendo de una manera disoluta.
Cuando lo había gastado todo, vino por aquella tierra un hambre terrible, y empezó él empezó a pasar necesidad.
Fue entonces y tanto le insistió a un habitante de aquel país, que lo mandó a sus campos a guardar cerdos. Le entraban ganas de llenarse el estómago de las bellotas que comían los cerdos, pero no lo dejaban que se las comiera.
Se puso entonces a reflexionar y se dijo:
–Cuántos jornaleros de mi padre tienen abundancia de pan, mientras yo aquí me muero de hambre. Me pondré en camino adonde está mi padre, y le diré: «Padre, he pecado contra el cielo y contra ti; ya no merezco llamarme hijo tuyo. Recibeme como a uno de tus trabajadores.»
Se puso en camino adonde estaba su padre: cuando todavía estaba lejos, su padre lo vio y se enterneció profundamente; y echando a correr se le echó al cuello y lo cubrió de besos.
Su hijo le dijo:
–Padre, he pecado contra el cielo y contra ti; ya no merezco llamarme hijo tuyo.
Pero el padre dijo a sus criados:
–¡Pronto!,traigan la túnica más rica, y vístansela; póngale un anillo en la mano y sandalias en los pies; traigan el becerro cebado y mátenlo. Comamos y hagamos una fiesta; porque este hijo mío estaba muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y lo hemos encontrado.
Y empezó el banquete.
Su hijo mayor estaba en el campo.
Cuando al volver se acercaba a la casa, oyó la música y el baile, y llamando a uno de los mozos, le preguntó qué pasaba.
Este le contestó:
–Ha vuelto tu hermano; y tu padre ha matado el becerro cebado, porque lo ha recobrado sano y salvo.
El se indignó y se negaba a entrar pero su padre salió e intentaba persuadirlo.
Y él replicó a su padre:
–Mira: en tantos años como te sirvo, sin desobedecer nunca una orden tuya, a mí nunca me has dado un cabrito para tener un banquete con mis amigos; y cuando ha venido ese hijo tuyo que se ha comido tus bienes con malas mujeres, le matas el ternero cebado.
El padre le dijo:
–Hijo, tú estás siempre conmigo, y todo lo mío es tuyo: deberías alegrarte, porque este hermano tuyo estaba muerto y ha vuelto a la vida, estaba perdido, y lo hemos encontrado.

3 de Marzo. III Domingo de Cuaresma /C

Evangelio según San Lucas (Lc 13,1-9)

En aquella ocasión se presentaron algunos a contar a Jesús lo de los galileos, cuya sangre vertió Pilato con la de los sacrificios que ofrecían. Jesús les contestó:
–¿Pensáis que esos galileos eran más pecadores que los demás galileos, porque acabaron así? Os digo que no; y si no os convertís, todos pereceréis lo mismo. Y aquellos dieciocho que murieron aplastados por la torre de Siloé, ¿pensáis que eran más culpables que los demás habitantes de Jerusalén? Os digo que no. Y si no os convertís, todos pereceréis de la misma manera.
Y les dijo esta parábola:
Uno tenía una higuera plantada en su viña, y fue a buscar fruto en ella, y no lo encontró.
Dijo entonces al viñador:
–Ya ves: tres años llevo viniendo a buscar fruto en esta higuera, y no lo encuentro. Córtala. ¿Para qué va a ocupar terreno en balde?
Pero el viñador contestó:
–Señor, déjala todavía este año; yo cavaré alrededor y le echaré estiércol, a ver si da fruto. Si no, el año que viene la cortarás.

Al desierto, igual que su maestro.

Al desierto, igual que su maestro.

Benedicto XVI, el Papa que muchos tildaron de “conservador y retrógrado” ha sorprendido al mundo con una decisión que tal vez muy pocos tendrían la valentía de tomar.
Una mente brillante aunada a una excelente preparación filosófica y teológica marcada por las Escrituras y por los Padres de la Iglesia, guiada además por un pensamiento esencialmente histórico, además del dominio de diez lenguas y de ser un virtuoso pianista. Su libro “Folosofía, Teología e Historia así lo patentiza. Alli expresa que la fe de la Iglesia debe fundamentarse en el aspecto liberador del Evangelio y en la tradición primitiva del cristianismo, en especial de los Padres de la Iglesia, de los que es posible hacer una re-lectura para el hombre de hoy.

Fue colega de Hans Küng en el año 1966, pero a un momento dado tuvo con él grandes divergencias. Su libro “Introducción al Cristianismo” refleja una claridad sorprendente, así como una profunda sinceridad en el señalamiento de aspectos que deben corregirse dentro de la Iglesia y del Papado; en algún momento fue malinterpretado por personas que lo utilizaron para cuestionarlo. Pareciera ésta ser una constante en su vida. Se distanció de los movimientos marxistas de los años 60 que en Alemania terminaron en serios disturbios a finales de los años 1968 y 69.
Fundó en 1972 la publicación teológica Conmunio, junto con Hans Urs Balthasar, Henri de Lubac y otros. Publicación que se ha convertido en una de las más influyentes del mundo. Publicada en diecisiete idiomas, alemán, inglés y español entre otros.

En marzo de1977 fue consagrado arzobispo de Múnich y Freising y luego en junio Pablo VI lo nombró Cardenal del título de S. María Consolatrice al Tiburtino. En 1977 se produce su primer encuentro con Karl Wojtyla, después de haber cruzado correspondencia, ideas y libros por muchos años con él. Como Profesor de Teología abría el acceso a sus alumnos, a pensadores que en aquél momento eran considerados de avanzada y por lo tanto inspiraban la desconfianza de la Jerarquía católica, tales como Yves Congar y Henri de Lubac, así como de autores protestantes como Karl Barth, Oscar Cullmann o Dietrich Bonhoffer. Esto le atrajo recelos dentro del ala conservadora de la Iglesia.
Defendía la necesidad de abrirse a un nuevo lenguaje, que partiendo del Evangelio conectara más con el mundo contemporáneo. En el Concilio Vaticano II, en un debate defendió la idea de la elaboración creativa de los textos con una nueva manera de exponer las verdades centrales del Cristianismo, como la Revelación o la Salvación.

Combatió la identificación del compromiso social cristiano en colaboración con las nuevas estructuras de poder revolucionario político que surgieron en latinoamérica. Condenó las más exacerbadas manifestaciones de la Teología de la Liberación, imbuída por las ideas extremistas de un maxismo que ya estaba en decadencia.
Siempre consideró que el Cristianismo va mucho más allá de la mezquina defensa de estructuras políticas y sociales que siempre serán pasajeras y que la fe cristiana es incompatible con sistemas de dominación y opresión, cualquiera sea su signo. Por eso denunció también los males derivados del Capitalismo y el Liberalismo occidentales.
Su obra pasará sin duda alguna, a formar parte del tesoro de la Iglesia al lado de los grandes Padres y Doctores de la Iglesia. Este nombre se le da a una serie amplia de escritores que va desde el siglo III hasta el Siglo VIII, que se caracterizan por la claridad de su doctrina, la santidad de vida y el reconocimiento de la Iglesia. Florecieron en Occidente, escribiendo en latín y en Oriente lo hicieron en griego, en armenio, copto, siríaco y árabe. Sus obras se sirven de la cultura griega y latina para explicar los misterios cristianos.
La Obra escrita de Ratzinger es sin duda alguna, una contribución valiosísima que contribuirá a acrecentar el patrimonio del pensamiento de la Iglesia.

Por Razones de su cargo J. Ratzinger ha escrito documentos de mucho peso que reflejan la postura de la Iglesia católica ante los problemas de diferente tipo que sacuden el mundo actual.
Le tocó estudiar la compatíbilidad de la Teología de la Liberación con la doctrina católica; así como prohibir el ejercicio de la enseñanza en nombre de la Iglesia a teólogos como Hans Küng, Leonargo Boff y otros españoles dicidentes de la Iglesia.

Esta sencilla nota no tiene pretención biográfica. Es sólo un homenaje nacido de la profunda admiración a una mente excepcionalmente brillante dedicada por completo al servicio de Cristo y de su Iglesia. Un sentido gesto de agradecimiento por las sabias orientaciones que supo imprimir a la Iglesia en el lapso de su pontificado y por el valioso legado de sus escritos, trabajo de toda una vida.

Al asceta y al mistico que hoy se retira a la soledad, igual que lo hacía Jesús cuando se iba a la soledad de la montaña o del desierto, le deseamos la plenitud de esa claridad interior que sólo emana de Dios. Que las largas horas de silencio sigan enriqueciendo su espíritu aún más, si es posible…y que allí nos encuentre a todos los fieles que continuamos en la misma barca, navegando en medio del oleaje turbulento del mundo en que nos toca vivir. Sus palabras seguirán como regueros de luz llegando a todos los rincones, pero su ejemplo conmueve, sacude el mundo, como la más exquisita prueba de generosidad, humildad y espíritu de servicio, cimentado en la fe firme de que es el Espíritu el que conduce a su Iglesia y que pese a todas las tormentas, “las fuerzas del infierno no prevalecerán contra ella”.

Julie Meucci M.
Caracas 1 de Marzo 2.013