Autor: alberto

Cantaremos. 6 de Septiembre. XXIII Domingo del Tiempo Ordinario /B

Hacer oír a los sordos y hablar a los mudos.

1. El evangelio de Marcos (7,31-37) nos narra la curación de un sordomudo en territorio de la Decápolis (grupo de diez ciudades al oriente del Jordán, en la actual Jordania), después de haber actuado itinerantemente en la Fenicia. Se trata de poner de manifiesto la ruptura de las prevenciones que el judaísmo oficial tenía contra todo territorio pagano y sus gentes, lo que sería una fuente de impureza. Para ese judaísmo, el mundo pagano está perdido para Dios. Pero Jesús no puede aceptar esos principios; por lo mismo, la actuación con este sordomudo es un símbolo por el que se va a llegar hasta los extremos más inauditos: Va a tocar al sordomudo. No se trata simplemente de una visita y de un paso por el territorio, sino que la pretensión es que veamos a Jesús meterse hasta el fondo de las miserias de los paganos.

2. Vemos a Jesús actuando como un verdadero curandero; incluso le cuesta trabajo, aunque hay un aspecto mucho más importante en el v. 34, cuando el Maestro “elevó sus ojos al cielo”. Es un signo de oración, de pedir algo a Dios, ya que mirar al cielo, como trono de Dios, es hablar con Dios. Y entonces su palabra Effatá, no es la palabra mágica simplemente de un secreto de curandero, sino del poder divino que puede curarnos para que se “abran” (eso significa Effatá) los oídos, se suelte la lengua y se ilumine el corazón y la mente. Y vemos que el relato quiere ser también una lección de discreción: no quiere ser reconocido por este acto taumatúrgico de curación de un sordomudo, sino por algo que lleva en su palabra de anunciador del Reino. Dios actúa por él, curando enfermedades, porque el Reino también significa vencer el poder del mal. Los enfermos en aquella sociedad religiosa, eran considerados esclavos de “Satanás” o algo así.

3. Su «tocar» es como la mano de Dios que llega para liberar los oídos y dar rienda suelta a la lengua. La significación, pues, por encima de asombrarnos de los poderes taumatúrgicos, es poner de manifiesto que con los oídos abiertos aquél hombre podrá oír el mensaje del evangelio; y soltando su lengua para hablar, advierte que, desde ahora, un pagano podrá también proclamar el mensaje que ha recibido de Jesús al escucharlo en la novedad de su vida. Esta es una lección que hoy debemos asumir como realidad, cuando en nuestro mundo se exige la solidaridad con las miserias de los pueblos que viven al borde de la muerte.

Fray Miguel de Burgos Núñez Lector y Doctor en Teología. Licenciado en Sagrada Escritura

CANTAREMOS:

      • Iglesia peregrina ……………………………………….. 108
        • Señor ten piedad, Gloria
        • Aleluya – Antífona
      • Te ofrecemos Señor ………………………………….. 186
        • Santo – Padre nuestro
        • La Paz – Cordero de Dios
      • Por ti, Señor …………………………………………….. 134
      • Tan cerca de mi ……………………………………….. 193
      • Tomado de la mano ………………………………….. 191

6 de Septiembre – XXIII Domingo del Tiempo Ordinario /B

Evangelio según san Marcos (Mc 7,31-37)

En aquel tiempo, salió Jesús de la región de Tiro, y vino de nuevo por Sidón, al mar de Galilea, atravesando la región de  Decápolis. Le llevaron entonces a un hombre sordo, y tartamudo, y le suplicaban que le impusiera las manos.
El lo apartó a un lado de la gente, le metió los dedos en los oídos y le tocó la lengua con saliva. Después mirando al cielo, suspiró y le dijo:
–Effetá (esto es, «¡ábrete!»).
Al momento se le abrieron los oídos, se le soltó la traba de la lengua y empezó a hablar sin dificultad.
Él les mandó que no lo dijeran a nadie; pero, cuanto más se lo mandaba, ellos con más insistencia lo proclamaban; y todos estaban asombrados y decían:
–¡Que bien lo hace todo!. hace oír a los sordos y hablar a los mudos.

30 de Agosto–XXII Domingo del Tiempo Ordinario /B

Evangelio según san Marcos (Mc 7,7-8.14-15.21-23)

En aquel tiempo se acercó a Jesús los fariseos y algunos escribas venidos de Jerusalén . Viendo que algunos de los discípulos de Jesús comían con las manos impuras ,es decir, sin habérselas lavado, los fariseos y escribas le preguntaron :(Los fariseos, como los demás judíos no comen sin lavarse antes las manos hasta el codo, restregando bien, aferrándose a la tradición de sus mayores, y al volver de la plaza no comen sin lavarse antes las manos hasta el codo , y se aferran a otras muchas tradiciones de sus mayores; al volver del mercado, no comen sin hacer primero las abluciones, y observan muchas otras cosas por tradición, como purificar los vasos, las jarras y las ollas.)
Según eso, los fariseos y los letrados preguntaron a Jesús:
–¿Por qué comen tus discípulos con manos impuras y no siguen tus discípulos la tradición de los mayores?
Jesús les contestó:
– Que bien profetizó Isaías de ustedes, hipócritas, cuando escribió:
¡Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí. Es inútil el culto que me rinden, porque enseñan doctrinas que no son sino preceptos humanos!
Ustedes dejan a un lado el mandamiento de Dios para aferrarse a las tradiciones de los hombres.
Después Jesús llamó a la gente y les dijo:
–Escúchenme todos y entiéndame. Nada que entre de fuera puede manchar al hombre; lo que si lo mancha es lo que sale de dentro; porque del corazón del hombre salen las intenciones malas, las fornicaciones, los robos, los homicidios, los adulterios, las codicias, las injusticias, los fraudes, el desenfreno, la envidia, la difamación, el orgullo, la frivolidad. Todas estas maldades salen de dentro y manchan al hombre.

Cantaremos. 23 de Agosto. XXI Domingo del Tiempo Ordinario /B

Cuando Jesús anunció su proyecto eucarístico, de quedarse entre los suyos  convirtiéndose en alimento espiritual, ni siquiera sus íntimos lo entendieron. El desconcierto hizo presa de todos… Esta crisis a lo mejor sigue viva entre los cristianos. Necesitamos plantearnos la pregunta: ¿Creemos o no creemos en el Señor?….. La fe es un don gratuito que recibimos en el Bautismo, es un regalo vivo que debe crecer;  en la medida en que nosotros lo hagamos crecer, debe desarrollarse y dar frutos, si no, simplemente  vegeta y se hace estéril.

El anuncio de Cafarnaún se hace realidad en la Cena de despedida. Jesús sabía que tenía a su lado hombres que estaban  habituados por la vida del culto del Antiguo Testamento, a leer los símbolos y a percibir las verdades a través de las acciones y de los gestos, Por eso presuponemos que en los que escucharon a Jesús no hubo una inclinación a interpretar sus palabras metafóricamente, sino  en un sentido material y real. Por eso el escándalo en Cafarnaún fue colosal..!

Cuando aquél grupo de seguidores del Señor comenzó a disminuir, Él no se irritó. A lo largo de los años la historia se repite y también nosotros debemos definirnos: pertenecer a su Iglesia  significa optar por Él.  Es pues necesario transformarnos en verdaderos discípulos, convirtiéndonos en hombres y mujeres que viven de su palabra y de su eucaristía.

CANTAREMOS:

      • Que alegría cuando me dijeron ……………………………………… 161
        • Señor ten piedad – Gloria
        • Aleluya – Antífona
      • Este pan y vino …………………………………………………………….  91
        • Santo – Padre nuestro
        • La Paz – Cordero de Dios
      • Quién es ese ………………………………………………………………. 145
        • Si yo no tengo amor
      • Sólo el amor ………………………………………………………………. 166

23 de Agosto – Domingo XXI del Tiempo Ordinario /B

Evangelio según san Juan (Jn 6,55.60-60-69)

En aquel tiempo, Jesús dijo a los judíos: “Mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida”. Al oír sus palabras muchos discípulos de Jesús dijeron:
–Este modo de hablar es intolerable, ¿quién puede admitir eso?
Dándose cuenta Jesús que sus discípulos murmuraban les dijo:
–¿Esto los escandaliza?, ¿Qué sería si vierais al Hijo del Hombre subir a donde estaba antes? El espíritu es quien da vida; la carne para nada aprovecha. Las palabras que les he dicho son espíritu y vida, y a pesar de esto algunos de ustedes no creen.
Pues Jesús sabía desde el principio quiénes no creían y quién lo habría de traicionar. Después añadió:
–Por eso les he dicho que nadie puede venir a mí, si el Padre no se lo concede.
Desde entonces muchos de sus discípulos suyos se echaron para atrás y ya no querían andar con él.
Entonces Jesús les dijo a los Doce:
–¿También ustedes quieren dejarme?
Simón Pedro le respondió:
–Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna; y nosotros creemos y sabemos que tú eres el Santo de Dios.

2 de Agosto – XVIII Domingo del Tiempo Ordinario /B

Evangelio según san Juan (Jn 6,24-35)

En aquel tiempo, cuando la gente vio que en aquella parte del lago no estaban Jesús ni sus discípulos, se embarcaron y fueron a Cafarnaún para buscar a Jesús. Al encontrarlo en la otra orilla del lago, le preguntaron:
–Maestro, ¿cuándo llegaste acá?
Jesús les contestó:
–Yo les aseguro que ustedes no me andan buscando por haber visto señales milagrosas, sino por haber comido de aquellos panes hasta saciarse.
No trabajen por ese alimento que se acaba, sino por el alimento que dura para la  vida eterna y que les dará el Hijo del Hombre; porque a éste el Padre Dios lo ha marcado con su sello. Ellos le dijeron:
–¿Qué necesitamos para llevar a cabo las obras de Dios ?
Respondió Jesús:
–La obra de Dios consiste en que crean en aquel a quien él ha enviado.
Entonces la gente le preguntó a Jesús:
–¿Qué señal  vas a realizar tú, para que la veamos y podamos creerte? ¿Cuales son tus obras? Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como está escrito: «Les dio a comer pan del cielo».
Jesús les respondió:
–Yo les aseguro: no fue Moisés quien les dio pan del cielo; es mi Padre quien les da el verdadero pan del cielo. Porque el pan de Dios es aquel que baja del cielo y da la vida al mundo.
Entonces le dijeron:
–Señor, danos siempre de ese pan.
Jesús les contestó:
–Yo soy el pan de la vida. El que viene a mí no tendrá hambre, y el que cree en mí nunca tendrá sed.

26 de Julio. XVII Domingo del tiempo Ordinario /B

Evangelio según san Juan (Jn 6,1-15)

En aquel tiempo, Jesús se marchó a la otra orilla del mar de Galilea o lago de Tiberíades. Lo seguía mucha gente, porque habían visto las señales milagrosas que hacía curando a los enfermos.
Jesús subió al monte y se sentó allí con sus discípulos.
Estaba cerca la Pascua, festividad de los judíos. Viendo Jesús que mucha gente lo seguía, le dijo a Felipe:
–¿Cómo compraremos pan para que coman éstos ? (Le hizo esta pregunta para ponerlo a prueba , pues él bien sabía lo que iba a hacer).
Felipe le contestó:
– Ni doscientos denarios bastarían para que a cada uno le tocara un pedazo de pan.
Otro de sus discípulos, Andrés, el hermano de Simón Pedro le dijo:
–Aquí hay un muchacho que trae cinco panes de cebada y dos pescados, pero, ¿qué es eso para tanta gente?
Jesús le respondió:
–Díganle a la gente que se siente.
En aquel lugar había mucha hierba. Todos se sentaron ahí y tan sólo los hombres eran unos cinco mil.
En seguida Jesús tomó los panes, y después de dar gracias a Dios ,se los fue repartiendo a los que se habían sentado a comer. Igualmente les fue dando de los pescados todo lo que quisieron.
Después de que todos  se saciaron, dijo a sus discípulos:
–Recojan los pedazos sobrantes, para que no se desperdicien.
Los recogieron y con los pedazos que sobraron de los cinco panes llenaron doce canastas. .
Entonces la gente , al ver la señal milagrosa que Jesús había hecho, decía:
–Este es, en verdad, el profeta que tenía que había de venir al mundo.
Pero Jesús, sabiendo que iban a llevárselo para proclamarlo rey, se retiró de nuevo a la montaña, él solo.

El reconocimiento del poder local en Laudato Si.

Carlos Romero

Artículo escrito para POLITIKA UCAB por Carlos Romero Mendoza – 23 de julio de 2014

El calendario va acercando la fecha de la Conferencia de París sobre el Cambio Climático prevista para finales de este año 2015, múltiples conversaciones, negociaciones y consultas se están realizando en un esfuerzo por construir consensos que se traduzcan en compromisos globales a través de los cuales se concrete la responsabilidad de cada país en la lucha contra el cambio climático.

Debate Ciudadano 2Mientras la dinámica mundial sigue su curso, la Encíclica Laudato Si, sobre el cuidado de la Casa Común, reconoce el importante papel que puede jugar el poder local en la tarea de lograr grandes aportes en la preservación del ambiente. Las instancias locales representan una mejor oportunidad para lograr mayor responsabilidad ambiental, porque es en ese ámbito, donde se lograría desarrollar con mayor efectividad un fuerte sentido comunitario, una mayor capacidad de cuidado y una creatividad más generosa; además, es allí donde se puede alcanzar un entrañable amor a la propia tierra, así como se piensa en lo que se deja a los hijos y nietos.

Laudato Si encuentra en la legislación municipal el instrumento jurídico y político que permitiría alcanzar una mayor eficacia en las políticas ambientales, principalmente en la medida que sobre esas mismas políticas, se logre construir acuerdos de cooperación con poblaciones vecinas para sostenerlas y desarrollarlas.

Debate Ciudadano 3La Encíclica reconoce que la acción política local puede orientarse a la modificación del consumo, al desarrollo de una economía de residuos y de reciclaje, a la protec­ción de especies y a la programación de una agri­cultura diversificada con rotación de cultivos. Es posible alentar el mejoramiento agrícola de regio­nes pobres mediante inversiones en infraestructu­ras rurales, en la organización del mercado local o nacional, en sistemas de riego, en el desarrollo de técnicas agrícolas sostenibles. Se pueden facilitar formas de cooperación o de organización comu­nitaria que defiendan los intereses de los pequeños productores y preserven los ecosistemas locales de la depredación.

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19 de Julio – XVI Domingo del Tiempo Ordinario/B

Evangelio según San Marcos (Mc 6,30-34)

En aquel tiempo los Apóstoles volvieron a reunirse con Jesús, y le contaron todo lo que habían hecho y enseñado. Entonces él les dijo:
–Vengan conmigo a un lugar solitario,para que descansen un poco. Porque eran tantos los que iban y venían, que no les dejaban tiempo ni para comer.
Jesús y sus apóstoles se dirigieron en una barca a un lugar apartado y tranquilo. La gente los vio irse y los reconoció; entonces de todas los poblados fueron corriendo por tierra a aquel sitio y se les adelantaron. Cuando Jesús desembarcó vio que lo estaba esperando y se compadeció de ellos, porque andaban como ovejas sin pastor, y se puso a enseñarles muchas cosas.