Día: 10 de noviembre de 2011

13 de Noviembre.Cantaremos.

Jesús ha dejado en nuestras manos el Proyecto del Padre de hacer un mundo más justo y humano. Nos ha confiado la gran Noticia de un Dios amigo del hombre. Cuando no se vive la fe cristiana desde la confianza sino desde el miedo, todo se desvirtúa: la fe se conserva pero no se contagia, la religión se convierte en deber, en una observancia ritual, el evangelio es sustituido por el cumplimiento. Sería un error presentarnos un día ante el Señor con la actitud del tercer empleado: “Aquí tienes lo tuyo. aunque no ha servido de mucho para transformar nuestra vida, ni para abrir caminos nuevos de justicia a tu reino.

CANTAREMOS:

  • El Señor nos llama y nos reune……………272
  • Señor ten piedad- Gloria- Aleluya-Antífona
  • Este Pan y Vino………………………………..91
  • Levanto mis ojos…………………………….114
  • Señor Dios nuestro………………………….169
  • Amigo

13 de Noviembre. Domingo XXXIII del Tiempo Ordinario /A

Evangelio según San Mateo (Mt 25,14-30)

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos esta parábola: ” el Reino de los cielos se parece también a un hombre que iba a salir de viaje a tierras lejanas. llamó a sus servidores de confianza y les encargó sus bienes. A uno le dió cinco millones; a otro, dos; y aun tercero, uno, según la capacidad de cada uno, y luego se fue.

El que recibió cinco millones fue enseguida a negociar con ellos y gano otros cinco. El que recibió dos hizo lo mismo y ganó otros dos. En cambio, el que recibió un millón, hizo un hoyo en la tierra y allí escondió el dinero de su señor.

Después de mucho tiempo regresó el hombre y llamó a cuentas a sus servidores.

Se acercó el que había recibido cinco millones y le presentó otros cinco, diciendo :’Señor, cinco millones me dejaste, aquí tienes otros cinco, que con ellos he ganado’. Su señor le dijo: ‘Te felicito, siervo bueno y fiel. Puesto que has sido fiel en cosas de poco valor te confiaré cosas de mucho valor. Entra a tomar parte en la alegría del Señor’.

Se acercó luego el que había recibido dos millones y le dijo: ‘Señor dos millones me dejaste; aquí tienes otros dos, que con ellos he ganado’. Su señor le dijo: ‘Te felicito, siervo bueno y fiel. Puesto que has sido fiel en cosas de poco valor, te confiaré cosas de mucho valor. Entra a tomar parte en la alegría de tu señor’.

Finalmente, se acercó el que había recibido un millón y le dijo:’ Señor, yo sabía que eras un hombre duro,que quieres cosechar lo que no has sembrado. Por eso tuve miedo y fui a esconder tu millón bajo tierra. Aquí tienes lo tuyo.

El Señor le respondió: ‘Siervo malo y perezoso. Sabías que cosecho lo que no he plantado y recojo lo que no he sembrado. ¿Por qué, entonces, no pusiste mi dinero en el banco para que, a mi regreso, lo recibiera yo con intereses? Quítenle el millón y désenlo al que tiene diez. Pues al que tiene se le dará y le sobrará; pero al que tiene poco, se le quitará aun eso poco que tiene.

Y a este hombre inútil, échenlo fuera, a las tinieblas. Allí será el llanto y la desesperación”.